Las cerraduras de nuestras cuentas online, información personal, cuentas bancarias y preciados recuerdos no son llaves físicas, sino contraseñas. La fortaleza de estas contraseñas puede significar la diferencia entre proteger nuestros santuarios online o dejar la puerta abierta de par en par a los actores de amenazas.
Las contraseñas débiles son como cerraduras frágiles, fáciles de forzar por los malintencionados. Con las ciberamenazas en aumento, no se puede exagerar la importancia de una contraseña sólida.
Comprendiendo la seguridad de las contraseñas
Las contraseñas seguras actúan como una barrera que protege tu información personal y financiera de miradas indiscretas. Para asegurarte de que estás creando la mejor contraseña para la máxima defensa posible, necesitas comprender las amenazas que existen y los puntos débiles que buscan.
Vulnerabilidades comunes de las contraseñas
- Previsibilidad: Contraseñas como password123, 123456 o abcdef pueden ser fáciles de recordar, pero también son las primeras que adivinan los atacantes. Los cumpleaños, nombres y frases comunes son igualmente predecibles.
- Longitud corta: Cuanto más corta sea la contraseña, más fácil será descifrarla. Cada carácter adicional en una contraseña la hace exponencialmente más difícil de adivinar para un atacante.
- Falta de complejidad: Las contraseñas que sólo utilizan letras minúsculas o no usan números ni caracteres especiales son menos seguras que las que mezclan todo.
- Contraseñas reutilizadas: Si utilizas la misma contraseña en varias plataformas, una brecha en un sitio web puede comprometer tu seguridad en los demás.
- Contraseñas obsoletas: No actualizar o cambiar tus contraseñas periódicamente puede dejar tus cuentas susceptibles de acceso no autorizado con el tiempo.
Tipos de ataque a la contraseña
Ataque de fuerza bruta
Los atacantes prueban todas las combinaciones posibles de caracteres hasta encontrar la contraseña correcta. Las contraseñas más largas y complejas hacen que los ataques de fuerza bruta lleven más tiempo y sean menos factibles.
Ataque de diccionario
En este método, los atacantes utilizan una lista (o “diccionario”) de contraseñas y frases comunes para adivinar la contraseña. Por eso “contraseña123” no es una buena opción.
Phishing
No se trata de un ataque directo a la seguridad de la contraseña, sino de una técnica de engaño. Los atacantes engañan a las personas para que faciliten voluntariamente sus contraseñas, a menudo a través de correos electrónicos o sitios web engañosos.
Ataque de tabla arco iris
Los atacantes utilizan tablas precalculadas (llamadas tablas arco iris) para invertir las funciones hash criptográficas. Utilizar “sales” únicas con contraseñas hash puede mitigar este riesgo.
Relleno de credenciales
En este caso, los atacantes utilizan combinaciones de nombre de usuario y contraseña previamente filtradas para acceder a otras cuentas, aprovechando la reutilización de contraseñas.
5 consejos para crear una contraseña segura
Ahora sabemos que no basta con tener una contraseña para evitar que los actores de amenazas accedan a tu información. Las contraseñas tienen que ser fuertes para impedir que los hackers decididos consigan lo que quieren. He aquí algunos elementos que constituyen una contraseña fuerte.
1. La longitud importa
En pocas palabras, cuanto más larga sea la contraseña, mejor. Cada carácter adicional aumenta el número de combinaciones potenciales, haciendo mucho más difícil que alguien la descifre. Una buena regla general es aspirar a un mínimo de 12-16 caracteres.
2. Caracteres complejos
La variedad es la clave. Igual que una dieta equilibrada incluye diferentes grupos de alimentos, una contraseña sólida debe tener una mezcla de:
- Letras mayúsculas (A-Z)
- Letras minúsculas (a-z)
- Números (0-9)
- Caracteres especiales (!, $, &, *, etc.)
Esta mezcla de tipos de caracteres confunde a los posibles piratas informáticos y aumenta la seguridad de tu contraseña.
3. Evitar la previsibilidad
Si es fácil de adivinar, no cumple su función. Evita:
- Nombres (tuyos, de familiares, mascotas, amigos)
- Fechas significativas (cumpleaños, aniversarios)
- Frases comunes (por ejemplo, “iloveyou” o “password”)
Así que responde a la pregunta: “¿Cómo de segura es mi contraseña? Si es cualquiera de las anteriores, no es lo suficientemente fuerte.
4. Adopta la aleatoriedad
Evita formar patrones como “abcd” o “1234” o rutas de teclado como “qwerty”. Estas secuencias están en el radar de la mayoría de los atacantes. Cuanto más aleatoria y menos parecida a una palabra o frase parezca, más fuerte será tu contraseña.
5. La unicidad es vital
Nunca reutilices contraseñas en varios sitios o plataformas. Cada cuenta merece su propia contraseña única. Piensa en ello como si fuera una llave; no utilizarías la misma llave para tu casa, tu coche y tu caja de seguridad.
Recordar contraseñas seguras
Crear una contraseña segura es sólo la mitad de la batalla; el siguiente reto es recordarla. Si no utilizas un gestor de contraseñas, hay algunos trucos que puedes guardarte en la manga para ayudarte a recordarlas.
Mnemotecnia y técnicas de memoria: Las mnemotecnias son técnicas que transforman la información en un formato más fácil de recordar. Para obtener buenas ideas sobre contraseñas, considera la posibilidad de convertir una frase en una contraseña. La frase “¡Cada mañana a las 7, como 2 huevos!” puede convertirse en “Ema7,Ie2e!”.
Utilizando las letras iniciales de las palabras, junto con los números, habrás creado una contraseña que cuenta una historia que sólo tú podrías reconocer. Otros ejemplos de contraseña fuerte podrían ser una cadena aleatoria de letras, números y caracteres especiales:
- Qr4!7zP1@w9oE2#
- JbT8%rL2^aH6cZ0&
- pA4!cM7@tU3#eV5*
La importancia de no compartir contraseñas: Puede parecer una obviedad, pero compartir una contraseña, incluso con una persona de confianza, es como entregar la llave de tu casa. Con el tiempo, puedes perder la pista de quién tiene acceso, lo que aumenta el riesgo de uso indebido. Guarda siempre las contraseñas para ti, asegurándote de que sirven a su propósito principal: proteger tu información.
Autenticación de dos factores (2FA): A veces, incluso la contraseña más formidable puede beneficiarse de una capa adicional de seguridad. La autenticación de dos factores requiere un segundo paso de verificación, normalmente un código enviado a tu teléfono, correo electrónico o una aplicación de autenticación.
Esto significa que aunque alguien descifre tu contraseña, no podrá acceder a tu cuenta sin la segunda verificación. Es como tener una doble cerradura en la puerta. Si tus plataformas online ofrecen 2FA, es aconsejable activarlo.
Herramientas de gestión de contraseñas
Cuantas más contraseñas utilices, más difícil será recordarlas todas, especialmente si sigues las buenas prácticas de crear contraseñas complejas y únicas para cada cuenta.
Gestores de contraseñas
Los gestores de contraseñas son programas especializados diseñados para almacenar y gestionar tus contraseñas. Por lo general, funcionan así:
- Estableces una contraseña maestra segura para el propio gestor.
- A continuación, el gestor almacena de forma segura todas las demás contraseñas que introduzcas, normalmente cifradas, para una mayor protección.
- Cuando necesites acceder a una cuenta, el gestor puede rellenarla automáticamente o facilitarte la contraseña.
- Muchos también ofrecen funciones como generar contraseñas seguras por ti, avisarte de contraseñas reutilizadas o débiles, y notificarte si una contraseña puede haberse visto comprometida en una brecha.
Algunos ejemplos populares de gestores de contraseñas independientes son LastPass, Dashlane y 1Password.
Los navegadores web modernos, como Chrome, Firefox y Safari, tienen sus propios gestores de contraseñas integrados.
- Pueden recordar contraseñas y rellenarlas automáticamente cuando visitas sitios web.
- Los navegadores también pueden sugerirte contraseñas seguras cuando creas nuevas cuentas o actualizas las existentes.
- Las contraseñas almacenadas suelen sincronizarse entre dispositivos si utilizas el mismo navegador y estás conectado a tu cuenta.
Aunque los gestores basados en navegador ofrecen comodidad, puede que no tengan el conjunto completo de funciones o el mismo nivel de seguridad que las aplicaciones dedicadas a la gestión de contraseñas.
También hay que tener en cuenta que si alguien accede a tu ordenador o dispositivo y no está protegido, podría acceder potencialmente a todas las contraseñas guardadas en el navegador.
Mantenimiento regular de la contraseña
Aunque establecer una contraseña segura es un primer paso significativo, mantener su fortaleza a lo largo del tiempo es igualmente importante. Piénsalo de forma similar al mantenimiento de un coche: las revisiones periódicas garantizan que todo funcione sin problemas y que cualquier problema potencial se solucione con prontitud.
He aquí un enfoque estructurado para ayudarte a conseguirlo:
1. Actualiza regularmente tus contraseñas:
- Cambia regularmente tus contraseñas. Aunque existe cierto debate sobre la frecuencia ideal, se sugiere actualizar las contraseñas cada tres a seis meses.
- Las actualizaciones periódicas ayudan a contrarrestar el riesgo que suponen las posibles filtraciones de datos y limitan los daños en caso de que una contraseña caiga en las manos equivocadas.
2. Responde a los problemas de seguridad:
- Es especialmente importante cambiar las contraseñas si hay algún indicio de un problema de seguridad, como una alerta de actividad sospechosa o la noticia de una violación de un servicio que utilizas.
- Hablando de violaciones, es esencial mantenerse informado y ser proactivo. Si te enteras de un incidente de seguridad en una empresa o servicio en el que tienes una cuenta, no esperes a que se pongan en contacto contigo.
- Actualiza inmediatamente tu contraseña y vigila la cuenta para detectar cualquier indicio de acceso no autorizado.
- A veces, las empresas ni siquiera son conscientes de una brecha hasta mucho más tarde, así que es mejor prevenir que curar.
3. Evita cambiar las contraseñas con demasiada frecuencia sin motivo:
- Aunque las actualizaciones periódicas son importantes, cambiar las contraseñas con demasiada frecuencia o sin una buena razón puede ser contraproducente.
- Los cambios excesivos pueden dar lugar a contraseñas más débiles o a la dependencia de patrones si estás intentando recordar demasiados cambios.
- En lugar de eso, prioriza las actualizaciones en función de los riesgos potenciales y busca siempre contraseñas fuertes y únicas para cada actualización.
4. Combina el mantenimiento regular con la vigilancia
- El mantenimiento regular de las contraseñas, combinado con una supervisión vigilante de las infracciones, mantiene robusta tu seguridad online.
Recuerda que la seguridad de tus cuentas online es un proceso continuo, y mantenerse proactivo es clave para mantener tu información a salvo de posibles amenazas.
Lo esencial
Las contraseñas son las claves principales para salvaguardar nuestra información personal y financiera. Su solidez determina nuestra seguridad online, ya que las débiles parecen cerraduras frágiles fácilmente forzadas por entidades malintencionadas. Una contraseña segura (contraseña fuerte) es una experiencia online segura.