¿Qué significa historia clínica electrónica?
Una historia clínica electrónica (HCE) es una historia clínica digital que se origina en un formato electrónico o se convierte de papel o copia impresa a una versión en línea. Un EMR incluye información sobre un paciente específico, incluyendo:
- Información de contacto del paciente, incluidos los contactos de emergencia.
- Constantes vitales, como altura, peso, índice de masa corporal (IMC) y temperatura corporal.
- Citas anteriores y futuras con centros médicos.
- Órdenes del médico.
- Recetas médicas.
- Evolución médica y notas quirúrgicas.
- Formularios de consentimiento para divulgar información.
- Alergias.
- Historial médico anterior.
- Información de facturación, como el seguro.
- Resúmenes de alta y planes de tratamiento.
Un REM también se conoce como historia clínica electrónica (HCE).
Definición de historia clínica electrónica
La implantación de la historia clínica electrónica es más que un avance tecnológico. Se originó con la Ley de Tecnología de la Información Sanitaria para la Salud Económica y Clínica (HITECH), promulgada por el Presidente Obama en 2009, y legislada como parte de la Ley de Recuperación y Reinversión Estadounidense de 2009 (ARRA), o Ley de Estímulo, que asignó 36.500 millones de dólares para que el sector sanitario convirtiera las historias clínicas electrónicas (HCE) del papel al formato electrónico.
Esto incluye fondos para contratar a proveedores y especialistas en HCE/HCE y ofrecer incentivos a los proveedores de Medicare y Medicaid que avancen hacia la implantación de HCE. A medida que se imponga la implantación de la HCE, se pondrán a disposición de los proveedores de HCE futuros incentivos. La fecha límite para la conversión de datos médicos es 2015.
Las ventajas de la HCE son numerosas. Una razón clave es la noción de que las HCE pueden salvar vidas al reducir los errores humanos. Por ejemplo, si los médicos y enfermeros disponen de información médica electrónica crucial al alcance de la mano, cabe esperar menos retrasos en los tratamientos de urgencia y los cuidados críticos. Las HCE también resultan cómodas para los pacientes, al eliminar el repetitivo proceso de divulgar historiales médicos a nuevos cuidadores.
Sin embargo, las leyes de confidencialidad deben estudiarse más a fondo, y la seguridad de la HCE puede tener que afinarse, especialmente en lo que se refiere a los registros de conducta y abuso de sustancias. Otro problema es la implantación de la HCE en consultas médicas pequeñas con poco o ningún apoyo informático.