Un navegador web es un programa de software que permite al usuario localizar, acceder y mostrar páginas web. En el uso común, un navegador web suele abreviarse como «navegador»
Los navegadores web se utilizan principalmente para visualizar y acceder a páginas web en Internet, así como a otros contenidos creados utilizando lenguajes como el Lenguaje de Marcado de Hipertexto (HTML) y el Lenguaje de Marcado Extensible (XML).
Los navegadores traducen las páginas web y los sitios web entregados mediante el Protocolo de Transferencia de Hipertexto (HTTP) a contenido legible por humanos. También tienen capacidad para mostrar otros protocolos y prefijos, como HTTP seguro (HTTPS), Protocolo de Transferencia de Archivos (FTP), gestión de correo electrónico (mailto:) y archivos (file:).
Además, la mayoría de los navegadores también admiten complementos externos necesarios para mostrar contenido activo, como vídeo, audio y contenido de juegos dentro de la página.
Los primeros navegadores web empezaron antes de principios del siglo XXI, con un navegador de sólo texto llamado Lynx y otro navegador llamado Mosaic.
Más tarde, Netscape Navigator y Microsoft Internet Explorer surgieron como las dos opciones principales, hasta el lanzamiento de Mozilla Firefox en 2004.
Mientras tanto, los productos Safari de Apple se lanzaron en 2003, y se convirtieron en el sistema operativo estándar de los iPhones de la empresa en 2007.
Desde entonces, Google Chrome también se ha convertido en un contendiente en la guerra de los navegadores, la competición por impulsar la mayor parte de la actividad de los usuarios finales.
Debido a las necesidades sobre controlar la privacidad y resultado de búsqueda de los usuarios surgió DuckDuckGo un navegador centrado en la privacidad que respeta los derechos de anonimato del usuario.
Básicamente, un navegador web gestiona la actividad HTTP entre un cliente y un servidor, que es la columna vertebral del uso de la World Wide Web. Las URL son direcciones de tráfico para el navegador web, y éste utiliza direcciones IP y otras herramientas para establecer estas conexiones.
Además de facilitar la navegación por la web, los nuevos tipos de navegadores web tienen funciones adicionales gracias a una serie de plug-ins que pueden añadir características a posteriori. Algunas de ellas tienen que ver con la seguridad y la accesibilidad, mientras que otras tienen que ver con las comodidades del usuario final o la agregación de datos.
Algunos de los mayores avances en los navegadores web tienen que ver con la ciberseguridad. Por ejemplo, Google Chrome ha sido pionero en endurecer sus sistemas contra los sitios que no tienen un certificado SSL válido, lo que evita varios tipos de piratería y vulnerabilidades.
También se puede hacer que los navegadores web manejen protocolos más nuevos, como algunos de los creados por el Grupo de Trabajo de Ingeniería de Internet para aumentar la seguridad web.
Firefox y otros siguen su ejemplo
Otras nuevas tecnologías incluyen la idea del aislamiento del navegador, por la que las empresas dirigen la actividad de forma segmentada, separando la actividad de la red interna de la actividad del navegador web.
Cuando la actividad del navegador puede situarse fuera de un cortafuegos, y supervisarse mientras entra, la red interna puede disfrutar de mayores protecciones.
Mientras tanto, los lenguajes de codificación web subyacentes que se utilizan también han evolucionado. HTML se ha convertido en HTML 5, y las hojas de estilo en cascada o CSS han revolucionado las formas de mantener un diseño coherente de los sitios web.
El navegador web es una tecnología favorita muy utilizada en la barra de tareas del usuario medio, pero sigue evolucionando y desarrollándose para adaptarse a nuestras necesidades modernas de Internet.
Es interesante observar que, a medida que surge el fenómeno del Internet de las Cosas (IoT), en el que aparatos más diversos acceden a Internet, sólo los dispositivos tradicionales como los teléfonos móviles y los ordenadores portátiles utilizan realmente un diseño de navegador web.
Otros dispositivos pueden limitarse a enviar y recibir datos sin que el usuario final los maneje, aunque cosas como los frigoríficos inteligentes y otros dispositivos domésticos inteligentes pueden tener instalados navegadores web.
Estos pueden ser fundamentalmente distintos de los diseños de navegador web que conocemos hasta ahora.
Por ejemplo, las primeras implementaciones de navegadores web para frigoríficos inteligentes muestran cómo promueven tipos específicos de interfaces visuales integradas en la parte frontal del aparato, y la facilidad con que algunos de estos navegadores web pueden ser pirateados con malware que infecta el frigorífico.